PEDAGOGIA EN TIEMPOS DE SOUTH PARK
.-¡Hola niños!-.
Siempre saludo a mis hijos como si tuviera meses sin verlos, pese a que los veo a diario.
No obstante aún no han dado muestras de extrañeza por ese desbordante entusiasmo que muestro al verlos.
.-Hola Papá-. Es invariablemente la respuesta entre somnolienta y nihilista.
Bueno, nihilista es un poco exagerado. Al fin y al cabo tienen 9 y 10 años.
Entonces dejemos la respuesta en meramente somnolienta, y …poco entusiasta…
Mejor, solo somnolienta…La somnoliencia en sí, entraña, ya de suyo, el poco entusiasmo.
A favor de esta tesis apunta, por ejemplo, el hecho de que toda competencia se lleva a cabo a partir de las dos de la tarde, o por lo menos a media mañana.
Nadie va a levantar a Schumacher a las 4 y media de las madrugada:
.-Apúrate, que tienes que correr en Monza ahorita a las 5 y quince de la mañana. Dale rápido, porque ya la gente de Mac Laren está en el autódromo.
¡No Señor!
Toda gente que se respete, tiene que ir cogiendo mínimo, poquito a poquito… “Vísteme despacio porque tengo prisa”.
Volvemos a las 7 y 45 de una mañana cualquiera. Niños entrando al carro de papá…de su papá, no de cualquier papá, sino el suyo de ellos, pues.
.-¡¡¡Hola niños!!!-. Casi les grito, con el entusiasmo que me caracteriza, a pesar de lo temprano del encuentro.
Entusiasmo con el cual hecho por tierra mi propia teoría esgrimida antes… “Uno sí que habla pendejadas”.
.-Hola papá-. Niño uno.
.-Hola papá.- Niño dos.
Me he preparado psicológicamente para lo que viene acto seguido.
.-Papá-.
.-¿Si, hijo?-.
.-¿Tú sabes como murió anoche mi personaje favorito?.-.-¡No!-. “Ahí viene cualquier cosa”, pienso como los bateadores en cuenta de 3 bolas y 1 strike…O sea, conteo a favor del pitcher.
.-¡¡¡Se lo comieron las ratas!!!…jajajaj…..
.-¡Caracoles!-.
Cada vez que hablo con mis hijos utilizo términos y expresiones antiguas, a ver si compenso el vocabulario de la postmodernidad, South Park, incluido.
O mejor dicho, antes que nada: South Park.
“Caracoles”, “Carafita”, “Cáspita”, “Eureka”…Y un sin fin de otras pendejadas sepultadas en el inconsciente colectivo de los padres viejos.
.-¡Ajá!. ¿y qué más pasó?-. Les pregunto para tener un atisbo aproximado de cuál será el futuro de mis propios hijos. Si de seguir así serán hampones o meramente groseros….O si esta es una etapa que ha de quemarse con el transcurrir de los tiempos venideros…¡qué se yo!.
.-Bueno, apareció un mono con 7 culos…. ¿te imaginas, papá?….¡¡7 culos!!
.-¡Sí, pero antes había aparecido una tortuga con 5!-. sentenció la otra safrisca, Maria Fernanda, la mayor.
.-¿Una tortuga con 5 caparazones?-. pregunto asombrado.
.-¡No, papá!…5 culos…dos menos que el mono.
.-Y, papá, ¿sabes que le dijo Keni al profesor gay?
.-No.
.-Tú lo que eres es un pobre maricón de mierda…jajaja-.
¿Qué tal?
Esas son las conversaciones matutinas entre un padre y sus dos hijos…Sólo que en este caso, el padre soy yo, y los hijos son míos.
Desayuno de campeones, pero familar, nada menos.
Y qué les puedo decir:
.-¡Niños, no digan groserías!
.-Papa Dios los va a castigar.
.-A los niños que dicen groserias se los lleva el diablo.
.-Va a pasar un viento fuerte cuando dicen groserias y los va a dejar tuertos.
Tal como andan las cosas, su conclusión mas razonable y sencilla sería:
QUE PAPA TAN PENDEJO QUE TENEMOS,…QUE MALA LECHE LA NUESTRA…DE TODOS LOS PADRES DEL MUNDO, UN ACCIDENTE GENETICO, NOS HIZO TENER A ESTE PENDEJON COMO EL NUESTRO.
Nada, resignarme a la postmodernidad. Tratar de entender el asunto y hacerles comprender a ellos, si acaso cabe, la diferencia entre decir groserias y ser vulgar.
.-¿Y cuál es la diferencia?-. Me preguntó Ivan con su picardía, mezcla de ingenuidad y sapiencia prematura.
Algunos de ustedes, desprevenidos lectores, pensarán que South Park lo pasan en Playboy Channel… ¡No, qué va!…Lo pasan en Locomotion…un canal para niñitos…O ¿debo decir: carajitos?
Para agravar aún más la situación, les diré que nunca he visto South Park, pues lo transmiten a las 10 y media de la noche…y ya yo estoy durmiendo, mientras que el par de fascinerosos que tengo por hijos están aprendiendo toda clase de groserias en un canal para carajitos…
PEDAGOGIA EN TIEMPOS DE SOUTH PARK.
¿Qué será lo próximo?
